Dra. Consuelo Fuentealba, encargada del salivarium en Club Hípico de Santiago, en #Partieron: «Cuando la pasión llama, no hay nada que hacer. Lo mío es una vocación de familia, siempre quise aprender más de los caballos y le prometí a mi abuelo estudiar medicina veterinaria. Es difícil abrirse paso como mujer en este mundo, pero se puede. Hice la tesis en la clínica del Club Hípico y me quedé 5 años, con los Doctores Madariaga y Goic. Fue un gran aprendizaje.
Luego surgió la posibilidad de llegar al salivarium y asumí el desafío pocos días antes de El Ensayo. El proceso es así: tras la foto, el jinete llega al pesaje y el caballo pasa al salivarium. Medimos frecuencia cardiaca para saber como llegó el ejemplar, se le permite tomar agua y el cuidador lo ducha y lo camina unos minutos. Luego tomamos una muestra de sangre en el caso de las carreras que van a EE.UU y orina en los Grupo 1, que van a Australia. Más tarde, corrida la última carrera, se toman los números del orden de llegada y dependiendo de si la cifra da par o impar son las carreras que se envían al laboratorio de Denver, que por cierto me parece excelente. También tomamos muestras a los caballos que sufren accidentes en pista. Estamos trabajando bien, tenemos un equipo pequeño, pero que se entrega 100%. Estoy feliz de haber sido parte del Latino y los 150 años del Club Hípico.